jueves, 29 de marzo de 2012

El rey del barrio 
CC-601
Miguel Ángel Mercado Crivelli

“Un ladrón es el enemigo público número uno” o el hombre más  querido en toda  la vecindad, que me hiso apreciar la las películas de los 40s, ya que es muy escaza la cantidad de filmes de esos años y me dio mucho gusto ver algo que a mi prejuicio  de: será una película cómica medio mensa que tendrá chistes vulgares y llenos de groserías, pero como casi todo tipo de prejuicio estaba en un error. Nunca llego a lo vulgar y buscaba mucho el juego de palabras, un poco a albures pero no exagerado, sabiendo cómo llegar a todo tipo de persona sin hacer aburrida para un niño y chocosa para una persona mayor. 

Es una película muy divertida, por que maneja a Tin Tan como un disque jefe criminal que estuvo en EUA y que era un acecino a sangre fría, que eso es una falsedad. Es un anti héroe muy divertido, por ello tiene un toque de cine negro, pero con comedia, dejando atrás que el cine negro es serio y se le pude dar un toque de  humor mexicano. 

Algo que siempre aprecio del cine en blanco y negro es que tienen una excelente iluminación, donde los rostros se ven limpios y brillantes, lográndose ver los detalles del rostro sin necesidad de tener color. Los escenarios estaban bien hechos, eso me agrado mucho, que no se vieran de cartón, con todas esas técnicas hacen que nuestro cerebro rellene la ausencia del color y que no piensen que es necesario.

Algo muy peculiar que hay que denotar es como este tipo de películas refuerzan los estereotipos de típico macho mexicano, borracho, mujeriego, carismático. Y como es aceptado por las mujeres de esas épocas, ya que la pareja del protagonista no critica en ningún sentido cuando la otra mujer que aparece en la fiesta de Pepito le echa los perros enfrente de ella, asumiendo que eso es de lo más cotidiano.

Hay que trasportarnos a la época, cuando eso era moralmente aceptado y criticar algo como ello era igual a estar loco, o en caso de una mujer una loca revoltosa machorra. Así me doy cuenta que este tipo de películas que son divertidas, muestran una imagen muy delicada de nuestra sociedad, donde se tenía de menos a la mujer. Sí suena algo exagerado pero estos detalles son tan pequeños que no te das cuenta cuando se llena el recipiente.

Para concluir, me agrado la película, quitando lo de la visión que se tenía, pero no es algo que me asuste, me llama la atención y del ingenio de hacer una filme de cine negro con un buen sazón a comedia mexicana, que caracteriza a las películas de nuestro país, la capacidad de burlarnos de nosotros mismos en cualquier situación, Octavio Paz lo dijo muy bien, en México lo conocen otros países por su carácter revoltoso y feliz.

Lorena San Martin

El Rey Del Barrio

Debo admitir que aún después de un tiempo considerable, el cine sigue sorprendiéndome cada día y de diferentes maneras. La tecnología ha hecho que lo veamos como una industria casi inalcanzable, y muchas veces se nos cierra el mundo y no logramos ver que el arte está presente en cierta sobriedad, sin necesidad de mucho.
    No me considero fan como tal del cine de oro, pero sé reconocer que es bueno (o más bien, en México, uno de los mejores), prueba de esto —y no por sobresaltar el filme más de lo que debería— es la comedia que hacía Germán Valdez TinTan, esta vez hablo específicamente de El Rey del Barrio.
    Un cinta que reúne un perfecto cocktail de personajasos: Silvia Pinal, Fannie Kauffman La Vitola, Ramón Valdez, Yolanda Montes Tongolele y por supuesto Tin Tan, entre otros. Esto mismo me ha hecho disfrutar de insistente manera la cinta, pues a pesar de no estar acostumbrada ni estar  empapada de este cine, lo he disfrutado en gran medida, pues no dejé de parar de reír en cada escena.
    Al comienzo de El Rey del Barrio he sentido duda de si me gustaría o no, también he hecho ciertos prejuicios con base en otras cintas que ya he visto, traté de olvidarme un rato de las películas que estoy acostumbrada  a ver y comencé a disfrutar de cada una de las escenas, secuencias, actuaciones, el guion en particular, pero sobre todo aquel humor blanco que me ha parecido excelente.
    No buscaré especificar si hablamos de cine negro, ni tampoco cuestionaré datos que podemos encontrar en cualquier liga de Google, no sé si es considerada un de las mejores películas, o si es algún tipo de parte aguas de esta gran época para el cine mexicano. Pero si especificaré con las características que para mi resultan ser exquisitas a la vista, al oído y al lado artístico todos tenemos y disfrutamos.
    Primero que nada puedo considerar la musicalización, más que un acompañamiento de la escena (diálogos, actuaciones, etc) un complemento como pieza clave, pues no solo es melodía de fondo, mas bies parte fundamental de la escena, pues acentúa acertadamente cada idea que se quiere desarrollar en la historia.
    Las locaciones y el vestuario me han sorprendido, sé que es porque no estoy acostumbrada a  ver “la época” como algo natural, más bien como algo reproducido adrede. Las actuaciones también me han parecido fuera de serie, y no porque sean las mejores, sino porque para mí son tan actuadas que después de más de cincuenta años son diferentes y me parecen buenas.
    Si la pregunta es ¿te gustó? Diría que si me gustó, pues nunca esperé ver tecnología ni perfección, solo disfrutar de una de las caras del cine que no me tocó vivir pero que perfectamente puedo percibir el arte en esos filmes.

miércoles, 28 de marzo de 2012

El rey del barrio: Tin Tan el gran comediante

Por Ana Cruz

Esta película es una de las más representativas de la época de oro del cine mexicano y sobre todo de la comedia nacional. Un cine que hace más de sesenta años,  era más inocente y de humor blanco en su narrativa y en su estética escénica, que en la de años posteriores.

La característica de las películas de Tin Tan es que representa una cultura urbana típica del submundo de los barrios de la ciudad de México, aunque de manera cómica plasma situaciones comunes de la sociedad y a mi parecer hace una crítica al sistema y a lo cotidiano.

Tin Tan ha sido un personaje que ha tenido tanto ovaciones como desprecios por parte de la opinión pública, puedo decir por experiencia propia de que a mi mamá no le gusta este comediante, porque no le gusta su manera de hacer comedia y porque siempre le chocaba de que joven siempre pasaban en la televisión las películas de él, pero por lo que he visto y por lo que me han comentado gente cercana es que si era muy bueno, era un genio y la verdad no le pide nada a grandes como Chaplin o el mismo Cantinflas.

Siempre ha habido un debate sobre quién es el mejor comediante, yo creo que tanto Cantinflas como Tin Tan tienen lo suyo, su sello, los dos son reflejo de la sociedad mexicana son a final de cuentas estereotipos, Cantinflas de un personaje de los barrios de México de igual modo Tin Tan, pero el trajo a la pantallas a un personaje que se desarrollo en la frontera de México y EE.UU. los pachucos, grupos que criticaban a la cultura mexicana y a la norteamericana que Tin Tan lo adapto a un contexto humorístico.

Quizá sea porque  en mi casa no se ve a Tin Tan y antes no era tan fan de él, pero al haber visto esta película, pues me gusto, pero no para idolatrarlo, solo me merece respeto y reconocimiento a su obra, es que además como ese tipo de comedia pues no se me hace a mi tan chistosa, porque he visto otras cosas que me han hecho reír, pues se me hace ambiguo, pero reconozco finalmente que es un maestro e influencia en comediantes de la actualidad y que se deberían sentir agradecidos a su aportación a la comedia, porque sin él no existirían.

Por último, creo que para nuestros abuelos habría sido muy padre ver estas películas que eran tan sanas a diferencia del cine de ficheras y a los programas vulgares de hoy en día como guerra de chistes, pero que lastima que no a todos los chavos de esta época no se acerquen a este pasaje de la historia del cine y se enfoquen en basura televisiva sin ninguna reflexión.

"El Rey del Barrio" Por: Afrodita lezama

Recuerdos vinieron a mi ayer que vimos la película “El rey del barrio”, ya que tengo personas cercanas  que hasta la fecha prenden  el televisor y adoran ver  los canales del cine mexicano. De igual manera puedo decir que me gusta mucho aunque no es lo mío el cine de oro, sin embargo se apreciarlo y tomar en cuenta que grandes actores  surgieron en esa época y que mejor  ver y disfrutar a Tin Tan una vez más, siempre tan alocado con sus constantes gestos, coquetos ojos y escuchar su voz que para mis oídos es adorable.
Mientras la veía no podía evitar pensar en algunos encuadres y era imposible no darme cuenta en los cambios bruscos con los que la película contaba, por ejemplo  Tin Tan bailando y tambaleándose de lo tomado que estaba y repentinamente se encontraba sentado ya finalizando la canción. Ese parecido al concepto peter pan en este caso del barrio, me agrado mucho.

Considero que no contaban con la tecnología en la que hoy día usa el cine, pero me di cuenta que había momento en los que parecía que era cine mudo, por que cuando cometía todos los errores como tirar las cosas o destruirlas “accidentalmente” se escuchaba solo la música y lapsos de silencio. El audio es también parte de su vejes como película al estar en destiempo, ya que en ciertas escenas al hablar muy rápido se perdía la concordancia entre sus labios y el sonido que emergía de él. Otra cosa que siempre me a inquietado es el no saber por qué todas las mujeres  que salían en las películas de esa época gritaban hasta en  platicas comunes, claro, en las discusiones eran aun peor.

El exceso de torpeza (como ya lo había comentado en el párrafo anterior), así como me dio risa igual hubo momentos en que me desespero ya que eran demasiados los desastres que hacían, a no ser por  Tin Tan tal ves hubiese sido difícil terminar de verla. También me puse a pensar que hubiese sido peor si nos ponían a ver a clavillazo, pero sabía que no nos harían sufrir de esa manera (risas).
Hubo personajes que me gustaron ver de nuevo en escena y que no fue nada difícil de reconocerlos como a Silvia Pinal en sus buenos tiempos, los bailes exóticos de la gran Tongolele, la inconfundible voz de Ramón Valdés (hermano de Tin Tan), la rara hermosura  de Vitola que se hace aparecer en varias películas  alado  Tin Tan.

Otro punto que acostumbraban mucho era el de jalonear a las mujeres con movimientos bruscos  y los besos los hacían ver tan apasionados sin caer en el morbo, ya que todo constaba de la postura que hacia la actriz al quebrar un poco su cuerpo hacia atrás con la mano del hombre en su espalada que hacia resaltar el trasero y ver a la mujer sin fuerzas que para algunos en esos tiempos era muy romántico. Cuando “ El Rey del Barrio” llega al bar,  se encuentra a la vecina que tontamente comparaba con su prima y se da cuenta que era tanta su necesidad monetaria  que quería llevar la vida de mujer galante, aunque solo me di cuenta gracias al borracho con el cual forcejeaba, por que  eso de las fichas no lo entendía hasta que me explicaron que usaban la palabra ficheras al referirse a ellas.

Sin duda como siempre el mejor… Tin Tan

...me los balearía a todos contra la pared, taka taka taka taka...


Por Sam García


Este cine mexicano recuerdo haberlo visto por última vez cuando tenía 10 años, con mi abuela los domingos en las mañanas por televisión abierta, pero nunca me volvía exponer a estas cintas, talvez por un prejuicio creado por la influencia del cine hollywoodense que siempre me ha permeado, pero sin duda es interesante verlo con calma y predisponiéndome a analizar lo que tiene de fondo y no tanto de forma.

En la tarde escuché a un compañero preguntar si “El rey del barrio” formaba parte del cine negro y otra contestó que si era de los 40`s sí lo era. Sin duda alguna se nota que no nos ha quedado muy claro el concepto de cine negro, que en realidad se le da a todas aquellas películas que hacen alusión a hechos delictivos dándole un papel de gran peso o protagónico al antihéroe.

Dada esa definición claro que “El rey del barrio” es parte del cine negro, no por la época, sino por ciertas características, que,  si bien el director Gilberto Martínez Solares y Tin Tan, abordan desde un claro estilo mexicano buscan representar al protagonista como un delincuente.

Es común en la cultura mexicana jugar con la autoridad, hacer mofa de ella, ser románticos pero rudos y ser alegres con la música.

En esta cinta de 1949 donde el delincuente se disfraza en una vecindad sin duda se aborda la falla de este líder de criminales con ese tinte pícaro que tanto nos distingue a los mexicanos, que conforme avanza la cinta busca asimilar a los gángsters americanos pero siempre fallando y humillando a la imagen del policía mexicano.

El lenguaje de la película es muy característico para la época en que fue filmada, pues los movimientos de cámara son limitados, los paneos, los travells son utilizados sólo cuando los personajes necesitan un movimiento muy marcado, como en el caso de la escena donde Tin Tan se escapa del policía al ocultarse en el coche afuera de la vecindad.

La toma secuencia cuando el policía se une a la banda es bastante plano, pero dada la escena es la que mejor se aplicaba, los encuadres suelen ser pocos, intercalados entre long shot y medium shot, si mal no recuerdo no hay close up’s.

La música en la película no sólo busca ser un ambientador, sino que forma parte de la cinta, tanto en el momento de darle clases a la “nena” hasta la ebria “serenata” que dan un extra a la trama.
Sin duda alguna Tin Tan marca un estilo para el cine mexicano de aquella época al mezclar la comedia pícara que se nota desde el título “El rey…” que es un juego de palabras entre que es el líder de los delincuentes y todos lo “respetan” y que las mujeres lo llaman “mi rey” con el doble sentido sexual característico del mexicano.

Una muy buena película, ahora que me detuve a verla con calma y con ojos más críticos es sin duda una joya del cine mexicano, tanto que está catalogada como la película 18 entre las 100 mejores películas mexicanas.

The King of The Neighborhood

Por Mario Álvarez

Resulta que no soy cinéfilo, no porque no me guste en su totalidad el cine, sino porque no soporto estar tanto tiempo sentado en un mismo lugar frente a un televisor, sin embargo “El Rey del Barrio” es una de las pocas películas que me mantuvo sentado y atento a la trama y sobre todo despreocupándome del tiempo que podría tardar la misma, pero también supuse que fue por dos cosas; la primera es porque creo que todos debemos conocer lo que se hace y hacía en nuestro país en cuanto a este arte se refiere, la segunda es porque realmente vale la pena mirar el talento de los actores en aquellos tiempos, donde la tecnología cinematográfica no era la que se usa hoy en día, por esa razón, desde mi punto de vista, y como lo he mencionado ya en otros reportes, los actores tenían un poco más de trabajo escénico, puesto que buscaban la manera de tener la atención del público con simplemente la interpretación de los personajes pero que esta a su vez reflejaban la personalidad que un actor pudiera llegar a adquirir, esto quiere decir que, Tin Tan fue  un personaje al cual no se le puede imaginar siendo alguien con una actitud diferente a la que reflejaba en sus películas ya que la mayoría tenía la misma por así decirlo.

Haciendo un pequeño análisis me pude percatar que la trama es algo trillada, bueno al menos en estos años, los gangsters, proveniente de las gangas, nombre que se les daban a las pandillas o mafiosos comúnmente, asi mismo tenemos ya un prejuicio ante estos grupos delictivos, pero cabe mencionar que, en aquellos tiempos el tema no era tan impactante como hoy, sin embargo la gente tenía un estereotipo determinado de los gangsters  y las historias y formas de vida de aquellos sujetos podría ser relevante para la sociedad en esos momentos, en fin, el estilo de Tin Tan daba una imagen diferente a estas semejanzas porque el toque de comedia hace que disfrutes viendo los desastres y las apariencias que tienen.

El sentimiento del amor y la idiosincrasia del macho mexicano sobresalen en esta película, pero a su vez, brinda varios mensajes moralistas y de valores que hacen que esta película sea especial en ese sentido, dicen por ahí, que, las masas no piensan, solamente sienten, creo que esa afirmación se tomó mucho en cuenta en la producción de esta película, puesto que como lo mensionamos con anterioridad, sus temas atacan directamente por ese lado, y con la actuación de Tin Tan, el mensaje logra ser claro y directo, es por eso que considero que estos actores aportaron mucho al cine mexicano, por el talento, por el contenido, y por la intención de entretener al público.

El Rey del Bario

Lili (:

El rey del barrio sin duda es una de esas películas que te recuerda porque el cine mexicano es tan conocido en el mundo y precisamente porque “don Tin tan” es uno de los representantes más fuertes de este.

Lo que más salto a mi vista fue la facilidad de la película para capturar la atención de mis compañeros, en especial aquellos que no la habían visto antes, incluso logro un ataque de risa en dos de ellos, algo que irremediablemente me trajo recuerdos muy especiales, ya que esta película es una de las favoritas de mis abuelos y gran parte de mi infancia pase sentada en su sala acompañándolos mientras veían “las películas de sus tiempos”.

Mientras observaba la película me di cuenta que, si bien es algo muy marcado en los comunicólogos, el hecho de estar atenta a los movimientos de cámara y a los encuadres que utilizaban, no fue solo por la formación que he llevado en la carrera, más bien fue debido a un comentario antes de comenzar a verla “este director supo aprovechar y ocupar todo el potencial de Tin tan”, por lo que intente analizar que cuadros o que movimientos ocupaba para hacer eso, y el que más quedo grabado en mi memoria fue cuando le está “Rey” le está cantando a “Carmelita” después de haberla besado y que mientras él se tambalea de lo borracho, la cámara se mueve con él y te da la sensación de estarlo siguiendo.

No es la primera vez que la veo, pero no recordaba más de la mitad de la película, en el momento que empecé a sospechar que la había visto antes, fue cuando apareció “La Vitola” cantando, una escena muy característica de esta película, al menos en lo que a mi respecta.

Me gusto mucho la película en general, pero principalmente las actuaciones de personajes secundarios, digo no se puede discutir en ningún punto el papel desarrollado por Tin tan, asi que opte mas por enfocarme a los otros personajes, la pandilla por ejemplo si bien no conozco los nombres de los actores si puedo decir que no creo que hubiera mejores interpretaciones, eran el nivel perfecto entre maldad, bonachones y divertidos.

En conclusión, si me gusto mucho la película, no solo por las buenas actuaciones de la pandilla, de Tin tan y ni se diga de pepito, más que nada fue por lo que representa para mí y los recuerdos que me hace revivir, además de demostrarme una vez más que aunque nunca le di la razón a mis abuelos cuando me decían: “ya no hay películas como en mi época”, ahora entiendo mejor a que se referían.

El único punto que no me agrado no fue en el ámbito de la grabación, fue el guion, pero solo por el hecho de que me molesto ver cómo era tratado Tin tan, así que creo que la película cumplió su función.

:)

EL REY DEL BARRIO
ITZEL RIVAS BLASQUEZ

El rey del barrio (1949) dirigida por Gilberto Martínez Solares, es una película mexicana que surge durante la época del cine de oro en México, es protagonizada por uno de los personajes más famosos y sonados de esa época “TIN TAN” quien con sus grandes actuaciones y papeles obtuvo un perfil en el ámbito de la parodia como pocos personajes lo consiguieron, su fama y capacidad siempre fueron muy peculiar.
En la película que es en blanco y negro, se puede observar un clima o ambiente totalmente común, en donde se muestra cómo es que vivía la mayoría de las personas en esa época, quienes eran de bajos recursos al igual que los barrios típicos de esta ciudad, la versión humorística de cada uno de los personajes, fue lo que dio luz y brillo a este género del cine Mexicano. Gracias a películas como esta, es que el género crece y con el paso del tiempo la gente pedía y exigía rodajes de este tipo.
Aparecen personajes de igual importancia como la Vitola, característica de la parodia en esta década, así como La Tongo lele quien es identificada por ser una mujer muy guapa, y por su manera tan sensual y artística de bailar y Silvia Pinal quien hasta el momento forma parte del mundo de las estrellas, entre otros y muchos más personajes.
El plano secuencia, fue utilizado en algunas escenas de la película en donde se mostro como fue que el inicio de una toma dentro de alguna habitación terminaba en algún espacio exterior, los cuadros musicales son adecuados para el tipo de historia que se está narrando, así como las situaciones chuscas con un lenguaje determinado.
La doble vida de TIN TAN refleja dos situaciones una en donde ayuda a los pobres con dinero robado (en realidad durante toda la historia nunca pudo robar) y otra en donde es un ratero charlatán, la película te deja una enseñanza y esta consiste en el momento en donde su hijo Pepito le dice que es lo que le han enseñado en la escuela, “el que roba es un ser despreciable y enemigo de la sociedad” palabras que se quedan totalmente grabadas en la cabeza de este personaje quien fingía trabajar como ferrocarrilero, lo que le impide que continúe con esa manera fácil de obtener dinero aunque en la película no se muestra ningún robo solo intentos, como sabemos toda película tiene un mensaje y es cuestión de cada persona la interpretación que se le quiera dar, en ocasiones son tomadas en cuenta, otras veces solo quedan en el momento y no se aplican.
Es una trama redonda que hace de la cinta una trama completa, pero al mismo tiempo bastante moralista, perfil de estos rodajes que se presentaban en aquellos años.

Olé, olé

Por Lolita Cuevas-Avendaño

Nadie antes me lo había preguntado pero es preciso señalar que nunca había visto una película de Germán Valdés “Tintán”. Podría mencionar un sinfín de películas protagonizadas por Pedro Infante o la abuelita de todas las películas del cine de oro, Sara García, pero que por favor no me cuestionen acerca de la trayectoria fílmica del, aclamado por muchos, actor. El desconcierto reside en la poca admiración que le tenían en mi casa, no así de los otros dos personajes ya mencionados. De ahí que existiera de mi parte un ligero rechazo a las películas en cuyos créditos aparecía escrito Germán Valdés.
No se trata solamente de seguir fervientemente las preferencias cinematográficas de mi familia, pero nunca tomé la decisión de conocer, por lo menos superficialmente, el trabajo de Valdés.
Como primera experiencia Tintanezca, la película me pareció de lo más entretenida y divertida. No lo alabo, admito, pero sí me transmite una sensación de dedicación y seriedad. Sobre todo profesionalismo en su trabajo. Rodeado de hombres apuestos, con bigote al más puro estilo de macho mexicano, que incluye un familiar directo, con quien comparte créditos, Tintán enmarca su personalidad y sobresale por sobre todas las cosas. Desde luego es el caso, toda vez que es el protagonista, sin embargo estoy muy segura que habría sido suficiente de su presencia para llenar cada escena.
Hablando más en forma de la película, de lo que vi, de lo que no, y de lo que me habría gustado encontrar o que hicieran, comenzaré con el común de mis últimos reportes: alabanza a las escaleras. En este caso son aún de mayor tractivo personal porque me recuerda mi época de bachiller.
Desde que el protagonista baja por ellas desde las primeras escens, inmediatamente las asocié con las escaleras de la “Consti”, que bien se dice “es una vecindad”. Vecindad de la antigua Xalapa.
Ese ser “despreciable y enemigo de la sociedad” me pareció más bien un David Bisbal cuando cantó en la casa de la vieja rica. Con esos gallos disfrazados de falsetes, me queda claro que muchas veces únicamente basta con decirse español para levantar olés en el público.
Ya que me atreví a mencionar a la vieja rica, ahora me avocaré a aludir a la joven rica. La chichicuilota para ser precisos. El verla sentada frente al piano provocaba en mí una mezcolanza de risa y preocupación. No sabía en qué momento su brazo quebraría o desfallecería toda ella. Pero lo que sí, es que revivió en mi memoria las finas y perfectamente colocadas notas de Blanca Nieves.
Ubico en las Mujeres (con altas, cual debe ser) una suerte de seres con ganasy humedades escondidas. Apretadas al por mayor. Chiquitas. Con pujidos escondidos y gemidos cortados. Pero de pronto recuerdo que esa cinta es de 1949, un año antes de entrar a la década de adjudicarle voz y voto a las mujeres. Con diferencia de que “mujer que volteaba a ver a un hombre con disimulo, era dulce y encantadora”. Hoy, “mujer que voltea a ver a un hombre, ni disimula que es bien encantadoramente puta”.

martes, 27 de marzo de 2012

Tin Tan de los tesoros de México

Flor Romero 

Debo reconocer que en muchas ocasiones resulta bastante difícil lograr ver una película (y mas en la escuela) completa, poniendo atención, callados y sin perder ningún detalle que presenta la historia.  Pero en esta ocasión fue una de las mejores oportunidades que hemos podido tener de ver una de las películas del ídolo mexicano  Tintan obviamente ubicándonos desde un punto de vista crítico y reflexivo, no es nada fácil hacerlo con cualquier material, pero en esta ocasión lo fue e incluso estoy segura de que lo disfrutamos.
Tintan como sabemos es uno de los personajes mas reconocidos del cine mexicano, por diversos factores, como ser un excelente actor, por tener una comicidad sana y claro por haber tenido colaboraciones con los mas importantes grandes actores del cine de nuestro país.
La película que tuvimos oportunidad de ver El rey del barrio reúne muchos puntos que la caracterizan y que la colocan en el top de este gran actor, tales como el reparto, pues en esta hace una participación su hermana el famosísimo Don Rámon, vemos en sus años de juventud a la ahora primera actriz Silvia Pinal, reimos de las caras alargadas de Vitola y admiramos el cuerpo y la cadencia de Tongolele.
Por supuesto que la historia es parte importantísima del éxito de este filme, y es que pocas veces logras ver con tantas risas una historia en donde el personaje principal lo único que hace es intentar robar, (uno de los actos mas señalados por la sociedad mexicana). Quizá en aquella época sirvió para burlanse un poco o ver de manera más agradable la situación que muchos de los mexicanos pasaban en ese momento, y es que por lecturas históricas sabemos que fue en el periodo del presidente Lázaro Cárdenas que comenzaba la estabilidad económica de mucha de la sociedad de aquella época.
Tin Tan logra interpretar diversos personajes incluso en la misma película y es que lo observamos como español, en esta parte es rescatable al cien por ciento su rostro en todo momento a la hora de cantar, una canción que inclusive ni siquiera en ocasiones lograba tener sentido. Ahora, me imagino que si en aquella época era gracioso, para nosotros que ahora tenemos oportunidad de observar caracterizaciones de actores de todo el mundo y nos divirtió pues para los espectadores de aquellos entonces lo era aun más.
Por otra parte su participación con Vitola conjunta a lo que actualmente se sigue extrañando en la comedia, y es que actualmente es común reírnos de albures o frases en doble sentido, esta película nos demostró que no es necesario, pues muchos prácticamente nos doblábamos de la risa, de verlos bailar, mover sus rostros como lo hacían, en fin, para mi aquella época vale muchos mas en muchos aspectos que lo que ahora es nuestro cine.

sábado, 17 de marzo de 2012

El Halcón Maltes por Raquel Santopietro

El halcón Maltes
De nuevo nos encontramos con una película en blanco y negro pero con una mejor calidad de elaboración y respaldada por el cine sonoro, historia antigua de piratas y los robos de las embarcaciones en donde por esta vez nos enfocaremos en la leyenda del halcón Maltes, lo que seria un regalo para el rey por parte del pueblo de Malta se convirtió en un verdadero caos y encerró por años la incógnita de en donde quedo ese valioso regalo, nadie sabe su paradero pero todos quieren encontrarlo, ya que es una pieza antigua hecha en oro puro y bañada en las mejores joyas de esa época.
La búsqueda de una supuesta hermana que se convierte en la pauta para descubrir que algo anda mal en la ciudad desde la llegada de esa mujer y los misterios que la acompañan, detectives, charlatanes, ambiciosos y lo que parece ser un amorío todo esto junto tras el halcón Maltes.
La película muestra una buena fotografía y un suspenso que te envuelve a tal grado que empiezas hacer tus propias conclusiones para saber quien es el culpable de las dos muertes presenciadas y el ladrón del halcón Maltes después de 60 años de la perdida de este, o más bien de quien será el nuevo dueño, la ansiedad de los protagonista de esta historia por su ambición de tenerlo en sus manos y convertirse en un millonario por el valor de esta hermosa pieza.
A pesar de ser una película en blanco y negro si atrae por la historia contada sobre el misterio del halcón negro, por el manejo de suspenso con los detectives y los que andan tras la pista de la pieza, por ser una historia de piratas y los robos de las embarcaciones, aparte de que tiene una buena iluminación y esto hace que la película no se vuelva cansada ni tediosa.
La parte que más me gusto fue en donde están los charlatanes, la mujer y el detective en la casa esperando ansiosos la llegada del halcón para al fin poder apreciar la belleza inimaginable de la pieza, y entonces llega el paquete y se llevan la sorpresa de que fueron estafados!! algo así como una prueba de su propio chocolate.
Si recomiendo la película por que a pesar de ser vieja, del antiguo formato y de la falta de color, se me hizo una muy buena historia tanto cultural como dramática, y lo mejor de todo es que nadie conoce el paradero del misterioso halcón Maltes.

El Halcón Maltez

Cine Negro... algo quemado
Por Manuel Castelán

Una buena película no necesariamente debe ser con las grandes producciones que se tienen en la actualidad, debe estar compuesta por múltiples elementos que permitan clasificarla como buena; y esto, claro está, será algo meramente subjetivo. Sin embargo, se puede notar que muchas personas se dejan llevar por criterios basados en efectos visuales, actores conocidos y tramas comunes, fáciles de digerir; así, cuando observan una película con un desarrollo algo complejo, que visualmente no pareciera atractiva y que incluso no tiene escenas espectaculares, la crítica les es desfavorable y se le da valor mínimo. ¡Qué lástima que se esté cerrado a la experiencia de múltiples propuestas! Es como tener un vaso vacío, pero tapado, jamás se podrá llenar, ni entrar algo para que tenga valor.
Esta película, según los comentarios de críticos anteriores, se puede colocar como la mejor en su género, al menos sería una puerta de entrada a otras producciones que, de una u otra manera, se valdrían de su prestigio para poder realzar este género. Y es que en el contexto en que se generó la película, da para una valoración más allá de lo fílmico, donde cabe lo económico, que para tal momento, no se estaba muy bien.
Es decir, la crisis mundial de esa época provoca también un efecto en el juicio de los individuos, se comienzan a plantear problemas de existencia, de hecho, filosóficamente se habla de las corrientes existencialistas y algunas pesimistas, donde se parte de dos premisas: la valoración del hombre o el porqué de su existir; y la ferocidad del ser humano, o la idea de lo cruel que puede ser vivir.
De una u otra manera, esto se refleja en el filme; por un lado se desarrolla una trama cruda, donde un individuo mantiene una postura fría, que se vale sólo de su razón, de sus intereses personales y que cuando llega al punto de confrontación con sus sentimientos, con lo íntimo, se aferra a normas pre-establecidas que para el caso le dan seguridad, no tanto por mostrar su esencia, sino por defenderse de darla a conocer, de ocultar lo que siente, pues si lo muestra, se observará lo débil que es.
Puede ser que a eso se deba su éxito, a la confrontación que existía en la época y donde no sólo se buscaba no mostrar lo íntimo, sino que se tenía la intención de mostrar una seguridad basada en normas para el momento insuficientes, donde lo valioso se le deja a lo que podrá dar seguridad: el dinero, y como el contexto es de crisis, ese será el criterio, entre más dinero, mayor poder adquisitivo, que dará una imagen de seguridad, de hombres y mujeres de mundo, capaces por sí mismas; pero a la vez llenos de máscaras que sólo ocultan la debilidad que en realidad poseen y que si es descubierta, otros podrán valerse de ello para desprestigiarlos, para hundirlos.
El Halcón Maltez es una película de mucho contenido, que refleja lo trascendental del cine, no importa tanto la forma (que para su tiempo es una acertada producción) sino el fondo; pero eso sí, el fondo tendrá mayor impacto en tanto la forma sea la más adecuada. Personalmente no podré decir que sea mi película favorita, pero si entrará en la clasificación de las películas que valen la pena volver a ver.
EL GAVILÀN POR MARIO ÀLVAREZ TORRES

Podemos comenzar diciendo que en la película “El halcón maltes” a pesar de ser una grabación de antaño en los momentos donde todo el cine era en formato blanco y negro (escala de grises) se logran identificar las imágenes cálidas, digamos que se utilizó un efecto sepia, el cual daba la sensación de que la película no era tan antigua como se llega a tener el concepto en determinado momento  y definitivamente le da otro toque de seriedad al filme; quizá eso fue lo que buscaron los cineastas de ese entonces a los que les agrado la idea de comenzar proyectos con temáticas diferentes, temáticas apegadas a la realidad, basadas de hechos verídicos, en otras palabras, crímenes que a su vez, daba inicio a un nuevo género cinematográfico.

Queda claro que el cine negro, no tiene nada que ver ni con el formato ni con los actores que aparecen en la película, sino con la trama, el desarrollo y el tema de la misma. En aquellos años, cuando los asesinos urbanos habían no solo cometido un crimen, sino que habían inspirando a ciertos directores con sus historias que no necesariamente eran sangrientas, sino que representaban las inquietudes de la policía para resolver los casos intelectuales de asesinato.

Las expectativas son muchas antes de comenzar a ver la producción, sin embargo es una película muy lenta de las cuales no estamos acostumbrados hoy en día, por supuesto que en ese entonces la gente se intrigaba y se emocionaba al observar imágenes que les fueran mostrando el seguimiento de pistas de los agentes que trataban de descubrir la verdad.

Lo que nunca se perdió en el filme de  “el Halcòn Maltes” y que hasta en nuestros días se sigue utilizando como método para vulnerabilizar los sentimientos del publico es el romance, los besos, las caricias, las provocaciones, las muestras de cariño y afecto, los enamoramientos, en fin, una serie de detalles que de alguna forma hacen que existan dos casos, en una sola película, la situación romántica con el actor o con la actriz protagonista y el problema en general, no cabe duda que los directores no pierden el tiempo, buscan  la manera de atrapar a quienes observan sus trabajos con base en la realidad, cuando alguien tiene la idea de que lo que está viendo sucedió, supongo que la percepción durante el filme proyectado será diferente al que tendría sino lo hubiese sabido.

Concluyendo con el reporte de lectura, podríamos hacer énfasis en la fotografía que se utilizó, muy básica, pero bien hecha. Las tomas no detallaban, eran más cerradas, el juego de luces ayudó mucho para que algunas imágenes no quedaran totalmente obscuras, y se utilizó un vestuario y escenarios con ciertas características que reforzaban a un más la intención de los mensajes dados en la proyección.
El halcón maltes

Por Miguel Angel Mercado Crivelli

 Empezare comentando que El halcón maltes es un claro ejemplo de uno de los géneros norteamericanos del cine después de la guerra mundial el cine negro, donde se tiene un antihéroe, que a pesar de tener una línea de la justicia con temple de acero, emplea técnicas poco ortodoxa como, el chantaje, la manipulación, engaño, teniendo siempre un haz en su manga.

Si nos remontamos a los años cuarentas sin duda esta es una joya cinematográfica, por que maneja bien el concepto del cine negro y mantiene un ambiente de suspenso he incógnitas que no te dejan deducirla fácilmente. Manejando el concepto de Doc. House “Todos mienten”  y es uno de los puntos clave de esta película, que a pesar que el detective Sam Spade (Humphrey Bogart) quiere llegar a resolver el asesinato de su compañero, tiene el conflicto de que todos tienen diversas versiones de la historia, que le provoca utilizar todas sus habilidades de deducción e inspección , que es algo que me gusto del personaje, el hecho de ver el ultimo detalle, que es una parte fundamental en el protagonista del cine negro su habilidad de resolver los casos con su agilidad mental.

La mujer fatal que en mi gusto es un personaje que me encanta en todas las películas, utilizando la manipulación femenina logan cautivar a todos los hombres y así tenerlos a su merced, inteligente, sensual y muy astuta, entrenada en el arte del engaño, aunque en la película se maneja a Ruth Wonderly (Mary Astor) como una mujer fatal, para mi gusto no lo hace de tal manera, ya que en cada instante la película se muestra completamente vulnerable y para mi una mujer fatal debe mostrar fuerza y cambios de personalidad dependiendo la ocasión y no siempre tener el perfil bajo.
Joel Cairo (Peter Lorre) me dio riza, todo el tiempo pensaba que me diría un chiste ya que el perfil que tiene es de comediante, además en la película, se ve muy torpe y más cuando va a preguntar en la oficina del detective Sam sobre el halcón maltes y le quita la pistola.

Algo que en vez de emocionarme me causo riza fueron las escenas de acción (pero hay que tomar en cuenta que es una película de hace 71 años y que ahora tenemos una vida más rápida, llena de efectos especiales que cada día son más reales y que la película el halcón maltes es en blanco y negro es claro que la forma de narrar y las escenas de acción no tienen que ser juzgadas con las actuales, es fácil saber la respuesta.
Pero si hay que denotar, escenas incoherentes, por ejemplo el hecho que cuando desmañaban a alguien, se esperaban pacientemente a que despertaran. Hay no hay justificación.

Para concluir  como había mencionado es un buen ejemplo del cine negro clásico, que por el tiempo que vivimos se nos ara indiferente, pero que hay que recordar que estas películas son la base de las que vemos ahora.

¿Es cosa del pasado?

Flor Romero 

Se sabe por lo que se comento en clase que El halcón maltes nace y al mismo tiempo lo hacen las películas clasificadas como de cine negro. Así que resulta interesante identificar por que esta clasificación si no se habla de cuestiones de terror, al menos no de aquellas situaciones relacionadas con fantasmas o  muertos, más bien se identifica con las personas que resultan mas vivas de lo inesperado.
La lectura que pudimos realizar para complementar nuestra visión de la película menciona algo muy interesante, y es el hecho de afirmar que El halcón maltes “acabará por convertirse en el espejo donde se refleja, de manera metafórica, la podredumbre de la sociedad de su tiempo” pequeños detalles que hubieran sido mejor que se quedarán precisamente plasmados y sucedidos solamente en aquella época del famosos cine negro.
Hablamos de vender, no nada más de plasmar simples ideas, el hecho de que esta película fuera exitosa nos refleja como (en nuestros tiempos) muchas veces la sociedad recurre a las salas de cine no solamente a contemplar una “buena película” si no a observar algo que prácticamente es un secreto a voces, pero que no se por que llega a confortar tontamente a mucha de la ciudadanía, creyendo que por ser proyectada y por recaudar dinero ayudará a cambiar aquello que queremos que cambie.
Así que entonces podría decir y darle una nueva clasificación a nuestro cine, CONTINUA SIENDO CINE NEGRO, por que se sigue representando en muchas de las películas a aquellas personas que hacen algo no por el bien común si no para beneficio propio, claro que si la situación no sale bien como es el caso del detective Sam Spade, se inclinara por conservar lo que tiene seguro, me refiero a lo que nos indican en la película, el trato no salió bien, bueno pues entrego a la mujer de la cual me estaba enamorando, me conformo con la anterior a la que seguiré manteniendo a obscuras, y logró escalar un escaloncito más, por que pues lo intente y gracias a mi agarraron a un grupo de asesinos. Eso me suena a uno, bueno a dos, bueno a más casos mexicanos, que de igual manera son llevados a las salas de cine, salen victoriosos malamente, pero por arte de magia al mexicano en unos años se nos olvida. Somos capaces de criticar la situación, si, pero consumimos y permitimos de esta manera el realce de muchas figuras que podrían quedarse en el pasado, sin embargo ayudamos a que nunca sean olvidados.
En cuando a lo que se piensa de la película, sigue sorprendiéndome le hecho de que ya existieran las visiones de tener tan buenas tomas, lograr caracterizar exactamente como se debe a cada uno de los personajes, los sets, las locaciones (que ya ahora si se verían mas que falsas), todo con el único fin de proyecta tal cual debe ser el hecho.  

jueves, 15 de marzo de 2012

Spade y Archer


El halcón maltés

Por Lolita Cuevas-Avendaño

De acuerdo a la opinión de muchos y lo que se ha aceptado en el común de las personas, la obra El halcón maltés, de John Huston (obra literaria original de Dashiell Hammett), marca el inicio del periodo clásico del cine negro.
Como en toda historia de detectives, donde predomina el misterio y asombro por sobre todas las cosas, no podía faltar el bueno el feo y el malo, traducido en esta cinta como el detective, la femme fatal y la banda de delincuentes.
Como personajes principales destacan Humphrey Bogart, Mary Astor, Sidney Greenstreet, Gladys George y Peter Lorre, por supuesto, brillando en la pantallla en blanco y negro.
En una película con tema de persecución, espionaje, detectives, eran más que necesarios, por no decir obligatorios, que la vestimenta de los personajes incluyera sombreros, abrigos, chaquetones, sacos y, claro, puros fumados de una manera tan elegante y precisa que incluso se agradece al director que se hayan hecho presentes en más de una escena. No se diga de la tan peculiar forma de encender los cigarrillos y habanos que, estoy segura, cautivó a más de uno de mis compañeros.
Básico que toda, toda la gente que aparece en las escenas de exterior luciera abrigos, en su mayoría, largos, toda vez que brinda una suerte de misterio alrededor de cada una; más aún si meten las manos a las bolsas del mismo, ya que sugieren que guardan –o esconden- algo.
Personalmente, mis instintos de mafiosa no se desarrollaron como, tal vez, debieron. Pero casi podría apostar por tan segura que me siento, que habría tenido un poco más de tacto, delicadeza, cautela y suspicacia que Cairo. No es por injuriar, pero él y nada es prácticamente lo mismo. En su situación, yo habría practicado por lo menos un poco más mi puntos débiles: velocidad e instinto de matar. En fin. Me dio chiste su papel.
Ya que señalé varios aspectos de la película, de lo que vi, lo que me dio risa, lo que habría hecho ahí en tiempo y forma, me desviaré un tanto para exponer qué me pareció. Habitualmente manifiesto desde las primeras líneas si la película en cuestión me causó emoción, alegría, desagrado, etcétera. Caso contrario con El halcón maltés.
Ni siquiera tengo una excusa, argumento, escape o coartada para salir por la tangente, mas me atrevo a decir sin temor a ser castigada que no me gustó. No. Esa no es la expresión correcta. Más bien me fue intramuscular, indiferente, desapercibida para mi corazón. No me enamoré esta vez.
Dista mucho de ser una cinta que recomendaría. Nunca me emocioné, nunca sentí estar en el punto más alto de la montaña rusa. Esperaba que subiera pero la sensación siempre fue la misma. No hubo exaltación, no hubo tentación, en mi caso, desde luego. No se trata de la trama, tampoco del blanco y negro, ni siquiera logro identificar qué es lo que rescataría. Reitero, no la volvería a ver.

martes, 6 de marzo de 2012


Los primeros pasos
El nacimiento de una nación (1915)
Miguel Angel Mercado Crivelli

Te imaginas como abra sido ser la primera persona en decidir atreverse a hacer un largometraje de tal magnitud, estar cansado de simples tomas básicas y decirte vamos a darle otra perspectiva de como se ve, esto es una gran ventaja cuando filmas una película, puedes verla del ojo que tu quieras, tienes totalmente el control de como contarla. 

Así sale “El nacimiento de una nación” que en cortos rasgos cuenta una historia sobre la guerra civil que se vivió en Estados Unidos de América entre el lado del sur y el lado del norte, todo por la búsqueda de la libertad de los esclavos negros que servían para la cosecha de algodón un material muy importante durante esos tiempos ya que era de gran valor económico por el comercio que se tenia con Inglaterra. Otro punto que toman es la muerte de Abraham Lincoln en su palco mientras miraba una obra de teatro.
Cuando veía la película no podía dejar de pensar que a comparación de películas más antiguas tenia un gran juego de cámaras, tomas que ahora son esenciales para una filmación, a pesar que eran muy largas, pero recordando que en esos tiempos lo mas importante era captar todos los detalles que pasaban enfrente del proyector, ya que no avía una voz o sonido que reforzara la imagen, teniendo que exagerar sus movimientos para poder decir todo lo que quisieran sin ninguna palabra.

Las tomas panorámicas, los Medium, close shot, Close up, entre otras, son tomas clásicas en una filmación cinematográfica, que asta la fecho son primordiales para que la fotografía de tu corto este correcta y siendo precursor de todo ello.  ¿Cuántas veces hemos usado algún tipo de estas tomas para un proyecto? Sí, en más de un montón de ocasiones. 

Otro toque que me dio mucha curiosidad es el uso de una aurora oscura alrededor de diversas tomas, con el fin de resaltar algún punto en especifico, por ejemplo, cuando el soldado enamorada de la hermana de su amigo veía la foto de ella durante su estancia en el campo de batalla, se generaba esa sombra para darle un punto de fuga donde toda la imagen saliera de la foto de la señorita, y que la atención se centrara completamente a ella y no te distrajeras con los elementos que estuvieran a su alrededor. Pero asunto con respecto a eso, era como asían eso en esos tiempos, ahora tenemos mucha tecnología que simplemente con un clip se logra, pero ellos como lo realizaba, yo supongo que se utilizaba una tela para darle ese efecto y así podían abrirlo y cerrarlo.

Es una película muy importante que ver, para darnos la idea de como era el cine en esos tiempos, simplemente cuantas personas en nuestros tiempos la han visto, te aseguro que pocas, ya que como avanzan los años, los intereses de la sociedad evolucionan. Yo acepta que al ve la película si tenia partes donde me sentía aburrido, pero es por que no estamos acostumbrados a un filme de ese tipo y hemos sido creados a algo con audio, somos una generación audio visual y la generaciones que vienen lo serán más. Todo esto no quiera lo importante de conocer como empieza, tener las bases que reforzarán nuestro bagaje y apreciación del séptimo arte.

Cómo nace...

Desde la cuna

Por Kst

Nuevamente una película que habla de Estados Unidos, bueno, no tan nuevamente, pues fue uno de los primeros largometrajes en tener una historia completa, desarrollada a lo largo de varias escenas con una secuencia lógica. Es además de la época (por obvias razones) del cine mudo; aquél cine que se hacia acompañar de una Orquesta en vivo para poder seguir la trama del filme.

Es muy raro, como sucedió con la película El Artista, encontrarse y estar frente a una producción de cine mudo, pues el avance tecnológico actual, no permite situarse en ese ambiente; es decir, se hace difícil imaginar que las películas eran narradas sólo con banda sonora y no con sonidos naturales, como la voz, o ruidos que ambientaban, como el correr de un río, o el estallido de los disparos.

Esto es, por ejemplo, lo que se extraña en esta película. Ver las escenas de guerra te llevan a querer observar un sinfín de disparos, bombas, correr de caballos, trotes y gritos, botas corriendo, relinchidos y sablazos, etcétera; sin embargo, sólo oyes una pieza musical, o una marcha usada para guerra, como la Marsellesa.

Otra cosa que vas a extrañar es la voz de los personajes, que sólo te muestran gestos y maniobras, tratando de mostrar el enfado o la alegría que sienten al interactuar con otros actores, o personajes de la trama; ya de por sí algo muy difícil, pues tienen que ser muy expresivos para lograr envolverte en ese clima de sentimientos y emociones, propios de las interpretaciones que realizan.

La voz, el ruido o sonido de la naturaleza, o de artefactos creados por el hombre, hace ver al cine como algo anticuado, y lo es, sin embargo no se debe restar el valor que poseen estos filmes, pues son los pioneros, los experimentos, los orígenes que permitieron que el cine fuera tal y como hoy lo conocemos, por eso estas películas, o al menos esta producción, se lleva el reconocimiento de quienes saben un poco lo costoso que sale el realizar una película así.

Otro tema es, precisamente, el tópico que trata la película, es decir, la guerra civil en Estados Unidos de Norteamérica, que ni tan unidos, al menos es lo que refleja la película. En lo personal no estoy muy en acuerdo de que el mayor productor de películas sea EEUU, aunque sí reconozco la labor que tienen en cuanto a la valoración de las producciones, aunque muchas veces se desvirtúen buscando el beneficio económico, más que el artístico.

Sería muy interesante el observar cómo se da el desarrollo del cine en países como Israel, China, Rusia, Japón, India, Camerún, Sudáfrica, Perú, Colombia, Venezuela, etcétera; aquellos lugares donde no se escucha en sobremanera la producción norteamericana, y que, sin embargo, tienen en sí mismos las capacidades de crear sus propios productos.

Desde mi perspectiva es necesario virar los ojos hacia otros puntos, no quedarnos con las anteojeras para mirar sólo hacia un punto, que si bien, deslumbra en cierto momento por la grandeza y publicidad de sus producciones, bien no es el único productor, ni el único capaz de realizar obras de arte en sus películas.

Este punto parte de la premisa de pensar que sólo EEUU produce cine, y cine de calidad; totalmente falsa. Lo que sí no podremos negarle es el empeño que muchos productores y, más bien, directores, han tenido por mostrar sus productos, y darle un realce a lo que es el cine; es decir, el empeño por mejorar un sueño de algunos que se convirtió en el sueño de todos.

Por José Manuel Castelán Lunagómez

lunes, 5 de marzo de 2012

¡Qué dolor, qué dolor, qué pena!


El nacimiento de una nación


Por Lolita Cuevas-Avendaño


Admito que no evoqué otra cosa ni a nadie más que al profesor Addexis, quien nos dio la materia de Historia en semestres pasados. Ver en el aula 27, en el mismo salón de los Pichulas CC601, “El nacimiento de una nación” era como revivir las heroicas historias que Addexis nos contó con lujo de detalle para que comprendiéramos finalmente la esencia y trasfondo de lo que hoy para nosotros es historia.
Básicamente, D.W. Griffith, director de la cinta, recreó la Guerra Civil de los Estados Unidos de América, representando en escenas la disputa entre el norte y el sur: la esclavitud o la libertad, la discriminación o el apoyo, la victoria o la derrota, la vida o la muerte. Sinceramente y recordando un tanto las clases de Historia ya citadas, me quedé falta de apreciar escenas de los esclavos cosechando y trabajando el algodón. En fin, lo importante aquí es que el triunfo lo tuvieron los del norte; abajo la esclavitud.
Encuentro en las escaletas, que constantemente se repiten en diversas escenas a lo largo de la película, una suerte de parecido con el interior del Titanic, a donde sólo acudes para “hacer que valga”.
Así también los bailes bañados desmedidamente de elegancia los comparo como lo vals de las grandes celebraciones en la películas de Harry Potter.
Nos guste o no, está claro que las damas de aquellos días emanaban elegancia y femineidad, cosa poco común en nuestros días. Como común dominador en la mayoría de las escenas, ubico sin reparo a los caballeros guapos patilludos y a las amas guapas olanudas.
Y obedeciendo al título del presente, la música que sirve de vestido a la película bien podría adornar la canción de “Mambrú se fue a la guerra”, aplicado, evidentemente, en otro contexto. Me enamoró la música, me fascinaron los trombone, me cautivó el sax. Amo la música de esta cinta.
Amo también el cambio tan radical de volumen cuando comienzan la guerra, los ataques y los estallidos.
Sobre este orden de ideas, tomando en cuenta que se trata de una producción que dista de ser actual- estamos hablando de cine mudo (aún)- me sorprende de sobremanera la forma en que recrearon las explosiones. Me impresionaron el humo y el polvo, tan reales. Imagino el set con gritos incesables de “¡Arrojen  más harina, sigan prendiendo brazas, no dejen de sentirse en una lucha, quiero más gritos, más acción!”.
 Me emocionaron las escenas tomadas desde una colina, quiero pensar, para que se pueda apreciar el movimiento de los actores en plena lucha, a unos cuantos metros de distacia.
Advertí, como buena observadora el manejo de escenas con una leve sombra alrededor del lente, principalmente en la parte superior de la pantalla. Desconozco si era un efecto indeseable que fue imposible borrar o es parte de la filmación.
Bien, claramente se aprecia que algunos de los actores eran de piel negra, mas la producción abusó con el maquillaje para volver a los no tan cafés en negros, cosa que me pareció más que desagradable, chistosa. Pero sí un tanto fuera de lugar. No sé si se debió al poco recurso humano de color, pero no se agradece el trabajo de los maquillistas.
Con esta cinta me siento un poco más familiarizada con las películas mudas y en blanco y negro. E atrevo a apuntar que la sala de cine es similar a la de “El artista” a donde la gente asiste con pipa y guante. Qué iban a pensar en aquel entonces que ahora al cine se va en jeans, con los amigos y, en el mejor de los casos, con lentes especiales para el 3D.
Siempre aprendemos algo nuevo, tal como me sucedió con relación al asesinato a quemarropa de Abraham Lincoln que, si bien sabía que había sido ultimado de esa manera, no tenía idea de que había sido durante una obra teatral; menos aún por un ligero descuido de su guardaespaldas.
Como el que lee este texto para revisarlo y calificarlo sabe que vimos la película en el salón y bien sabe que a esa hora el estómago pide un poco de alimento, debo aceptar que se me antojó el dulce de maíz con papas que sirven a los heridos de guerra en los hospitales. Nada, fue sólo mero comentario.